WASHINGTON
(apro).- La Administración Federal Antidrogas (DEA, por sus siglas en
inglés) colabora con los cárteles del narcotráfico de México para
“lavar” el dinero procedente de la venta de narcóticos en territorio
estadunidense, reveló este domingo el diario The New York Times.
Como
parte de una estrategia para “rastrear” el dinero que sale de la venta
de las drogas, la DEA, de acuerdo con el artículo de ocho columnas de
este domingo, ayuda a los narcotraficantes a meter a México cantidades
desconocidas de millones de dólares.
“Agentes antinarcóticos
estadunidenses encubiertos, han lavado o traficado millones de dólares
procedentes de la venta de drogas como parte del creciente papel de
Washington en la lucha contra los cárteles (del narcotráfico) en
México”, destaca el amplio reportaje de primera plana del influyente
rotativo.
Bajo el argumento de detectar e identificar las
estrategias que usan los narcotraficantes para lavar dinero, el
reportaje firmado por Ginger Thompson, apunta que los agentes de la DEA
“han manejado cargamentos de miles de dólares para su cruce fronterizo”.
Los agentes estadunidenses incluso depositan el dinero en las cuentas
(bancarias) que les designan los propios narcotraficantes o en otras
creadas por las autoridades del gobierno de Barack Obama.
Sustentado
con entrevistas a funcionarios y exfuncionarios de la DEA, el reportaje
de The New York Times enfatiza que aun cuando esta estrategia para
identificar los métodos de lavado de dinero procedente de la venta de
narcóticos se aplica en otros países desde hace tiempo, en México este
método se comenzó a emplear hace solamente unos años.
“Las
actividades de alto riesgo levantan preguntas delicadas sobre la
efectividad de la DEA para atrapar a los capos, subraya las
preocupaciones diplomáticas sobre la soberanía mexicana, y opaca la
línea entre la supervisión y facilitar las actividades criminales”,
puntualiza el reportaje de primera plana del Times.
Lo grave de
este tipo de actividades de la DEA –que también está siendo acusada como
protectora del cártel de Sinaloa– de acuerdo a los documentos que se
han presentado ante la Corte Federal del Distrito Norte de Illinois,
donde se prepara el juicio del presunto narcotraficante Jesús Vicente
Zambada Niebla, es que “permite a los cárteles seguir con sus
operaciones por meses o años, antes de hacer decomisos o arrestos”.
Los
entrevistados por la reportera de The New York Times rechazaron
cualquier comparación de esta operación de lavado de dinero, con la
bautizada como Rápido y Furioso, bajo la cual el gobierno federal de
Estados Unidos permitió, orquestó y facilitó el tráfico ilegal de armas a
México con el propósito de identificar para desmantelar a la red a
cargo de esta actividad criminal, pero que al final resultó en un
fracaso total que derivó en que más de 2 mil 500 armas terminaron en
manos de los narcotraficantes mexicanos.
“Mi regla fue: si vamos a
lavar dinero será mejor que entreguemos resultados, de otra forma la
DEA podría terminar con el principal lavador de dinero en este negocio y
ese dinero daría como resultado violencia y muertes”, declaró un agente
de la DEA a The New York Times.
Todos los funcionarios
entrevistados por este periódico, y de acuerdo con la reportera,
aceptaron hablar del asunto bajo la estricta condición del anonimato.
El
rotativo acota que la participación de la DEA en el lavado de dinero
que forma parte de una estrategia de unos 50 proyectos, todos
autorizados por el Departamento de Justicia, no se realizaban en México
desde 1998.
“Pero eso cambió en años recientes después de que el presidente Felipe
Calderon
declarara la guerra a los cárteles, y de que enlistara a Estados Unidos
para jugar un papel principal para confrontarlos, debido a que sus
fuerzas de seguridad tenían poca experiencia y una larga historia de
corrupción”, establece el reportaje del diario.
Las operaciones
encubiertas del gobierno de Estados Unidos en contra de los cárteles de
México no son nuevas, todas, según el reportaje son del conocimiento y
aprobación del gobierno del Departamento de Justicia. Los entrevistados
se negaron a señalar cuánto dinero ha lavado la DEA, pero simplemente
sostienen que ha sido mucho. “Si te vas a meter al negocio de lavar
dinero… tienes que tener la capacidad de lavar dinero”, aclaró un agente
estadunidense al periodico.
De acuerdo con la explicación que
hace The New York Times de esta estrategia de la DEA, agentes mexicanos
quienes se hacen pasar por traficantes, acompañados de autoridades
estadunidenses, recogen el dinero en efectivo de los traficantes en
México. “Los agentes estadunidenses transportan el dinero en efectivo en
vuelos gubernamentales para depositarlo en cuentas bancarias de los
narcotraficantes en Estados Unidos para luego, por medio de giros
electrónicos, enviarlo a las compañías que proveen bienes y servicios a
los cárteles”, destaca el recuento de The New York Times.
En otros
casos, son los mismos agentes de la DEA que se encargan de recoger el
dinero en efectivo dentro de Estados Unidos, y quienes lo envían
directamente a los cárteles en México.
Exfuncionarios
estadunidenses le aseguraron al diario que el Departamento de Justicia
ha autorizado a la DEA a lavar hasta 10 millones de dólares procedentes
de la venta de las drogas.
El reportaje subraya que “no está
claro” que este tipo de operaciones esté por encima de los riesgos que
implica instrumentarlas. Aclara además que el decomiso de dinero a los
cárteles ha sido mínimo.
“El año pasado la DEA decomisó unos mil
millones de dólares en dinero en efectivo y bienes, mientras que el
gobierno mexicano confiscó unos 26 millones de dólares por medio de
investigaciones sobre lavado de dinero, lo cual es una pequeña fracción
de los 18 mil ó 39 mil millones de dólares, que se estima fluye entre
los países –procedente de la venta de drogas–”, remató el artículo.
Imagen de la oficina de prensa de la presidencia venezolana que muestra
al mandatario Hugo Chávez junto con su colega cubano Raúl CastroFoto Xinhua
Dpa y Pl
Caracas, 3 de diciembre. Los
jefes de Estado y de gobierno de 33 países formalizaron hoy en Caracas
el nacimiento de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños
(Celac), un foro regional que constituye un escalón más en el intento de
integración y que implica el adiós del Grupo de Río, absorbido por el
nuevo bloque.
Chávez comentó que el plan de acción contiene el compromiso de las naciones que forman la troika –Chile, Cuba y Venezuela– para
prender los motoresdel grupo, cuya segunda cumbre se efectuará en Chile el próximo año.
Los miembros de la Celac no pudieron ponerse de acuerdo en el procedimiento para el funcionamiento orgánico, que tiene que ver con la toma de decisiones. Como no se pudo definir si tomará sus decisiones por consenso o mayoría, las determinaciones se harán por consenso mientras ese aspecto es debatido en futuros encuentros.
La troika también asumió el compromiso de celebrar reuniones para definir si el trío puede crecer con la incorporación de un representante de bloques regionales.
De igual forma, la troika estudiará una propuesta del presidente de Panamá, Ricardo Martinelli, quien ofreció a su país como sede de la secretaría general de la Celac, debido a que algunos mandatarios dicen que el organismo debe tener una mínima estructura.
En la Declaración de Caracas, la Celac manifestó que nace en la coyuntura histórica de los 200 años de independencia de los países americanos y bajo principios como el respeto al derecho internacional, la solución pacífica de controversias y la prohibición del uso y la amenaza del uso de la fuerza.
También mencionó el respeto a la autodeterminación, a la soberanía y a la integridad territorial, la no injerencia en los asuntos internos y la protección de los derechos humanos y la democracia.
El nacimiento de la Celac implica la despedida del Grupo de Río, que había surgido en 1986 tras la fusión del Grupo Contadora (Colombia, México, Panamá y Venezuela), que fue creado para apoyar la paz en Centroamérica, y el Grupo de Apoyo (Argentina, Brasil, Perú y Uruguay).
La Celac entró en escena con comunicados sobre defensa de la democracia y orden institucional, las islas Malvinas, el rechazo al bloqueo estadunidense a Cuba, la inclusión en países de la región, la seguridad alimentaria, la especulación financiera, los derechos de los migrantes, el desarrollo sostenible, la solidaridad con Haití y la condición mediterránea de Paraguay.
También expidió comunicados de la postura de Bolivia y Perú
sobre la coca originaria y ancestral, la emergencia que vive
Centroamérica por las crisis económicas mundiales, sobre el respaldo a
la estrategia de seguridad en Centroamérica, la eliminación de las armas
nucleares y la lucha contra el terrorismo y el narcotráfico.
El bloque debutó con la decisión de respaldar la candidatura del vicepresidente de Colombia, Angelino Garzón, al cargo de secretario ejecutivo de la Organización Internacional del Trabajo.
Tras ser aprobados todos los documentos con un golpe de escritorio, Chávez le entregó la dirección del grupo al presidente de Chile, Sebastián Piñera.
Aludiendo a las diferencias ideológicas con los otros colegas de la troika (Chávez y el presidente cubano, Raúl Castro), Piñera comentó que esto no debe obstaculizar un proceso de integración y, por el contrario, puede fortalecerlo.
“Asumo con mucha responsabilidad y esperanza esta presidencia pro témpore de la Celac. El siglo XXI va a ser de América Latina y el Caribe. Buscamos desarrollo integral, fortalecer la libertad de nuestros pueblos y crear oportunidades de igualdad”, dijo.
La delegación peruana destacó hoy el apoyo a una reunión internacional antidrogas y a la inclusión social, entre los acuerdos de la cumbre fundacional de la Celac.
El comunicado especial de la cumbre sobre el tema reafirma el compromiso de latinoamericanos y caribeños en la lucha contra los narcóticos, con un enfoque integral y equilibrado, basado en el principio de responsabilidad compartida.
A su vez, Alicia Bárcena, secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), subrayó que en la región se requiere trabajar mucho para conseguir la integración y las condiciones ahora lo propician.
En momentos en que Estados Unidos y Europa viven situaciones de crisis, esta área tiene muchas oportunidades para avanzar en el desarrollo y en la complementación económica intrerregional, señaló en entrevista con Telesur.
Recordó que Latinoamérica y el Caribe han incrementado sus reservas financieras en los últimos años, las cuales superan los 700 mil millones de dólares.
Periódico La Jornada
Domingo 4 de diciembre de 2011, p. 19
El bloque debutó con la decisión de respaldar la candidatura del vicepresidente de Colombia, Angelino Garzón, al cargo de secretario ejecutivo de la Organización Internacional del Trabajo.
Tras ser aprobados todos los documentos con un golpe de escritorio, Chávez le entregó la dirección del grupo al presidente de Chile, Sebastián Piñera.
Aludiendo a las diferencias ideológicas con los otros colegas de la troika (Chávez y el presidente cubano, Raúl Castro), Piñera comentó que esto no debe obstaculizar un proceso de integración y, por el contrario, puede fortalecerlo.
“Asumo con mucha responsabilidad y esperanza esta presidencia pro témpore de la Celac. El siglo XXI va a ser de América Latina y el Caribe. Buscamos desarrollo integral, fortalecer la libertad de nuestros pueblos y crear oportunidades de igualdad”, dijo.
La delegación peruana destacó hoy el apoyo a una reunión internacional antidrogas y a la inclusión social, entre los acuerdos de la cumbre fundacional de la Celac.
El comunicado especial de la cumbre sobre el tema reafirma el compromiso de latinoamericanos y caribeños en la lucha contra los narcóticos, con un enfoque integral y equilibrado, basado en el principio de responsabilidad compartida.
A su vez, Alicia Bárcena, secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), subrayó que en la región se requiere trabajar mucho para conseguir la integración y las condiciones ahora lo propician.
En momentos en que Estados Unidos y Europa viven situaciones de crisis, esta área tiene muchas oportunidades para avanzar en el desarrollo y en la complementación económica intrerregional, señaló en entrevista con Telesur.
Recordó que Latinoamérica y el Caribe han incrementado sus reservas financieras en los últimos años, las cuales superan los 700 mil millones de dólares.
Periódico La Jornada
Domingo 4 de diciembre de 2011, p. 19