Francia se fija en la literatura juvenil mexicana

Una de las razones para escoger a México como país invitado fue el fuerte crecimiento de su producción.

El auge de la literatura juvenil en México está empezando a llamar la atención en Europa. Y hace poco fue el país invitado en la Feria de literatura juvenil francesa de Montreuil, uno de los eventos más importantes de Europa para este tipo de literatura, con alrededor de 150.000 visitantes. Entre otras cosas, los organizadores eligieron al país por el fuerte crecimiento de su producción.

Los asistentes tuvieron la oportunidad de descubrir obras de autores e ilustradores de México como Alejandro Magallanes, Antonio Malpica o Gabriel Pacheco, invitados a presentar sus trabajos durante el evento.

Los organizadores querían dar a conocer al público francés esta literatura "que mezcla la modernidad con las tradiciones y las artes populares", explicó a BBC Mundo Sylvie Vassallo, directora de la Feria. "Elegimos a México como país invitado porque su literatura se conoce y se traduce poco aquí en Francia", añadió.

Además de lo que consideran la calidad y originalidad de las obras, otra razón justificó la decisión de los organizadores de la Feria: en México, la producción de libros de literatura infantil y juvenil conoce un fuerte crecimiento.

Según cifras de la Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana (CANIEM), la producción de este tipo de libros alcanzó 18 millones de ejemplares en el 2009, lo que representó el 13% del total de las obras publicadas en el país. En el año 2000, esta misma producción llegaba a cerca de 9 millones de libros.

"Durante años, México sólo recibía libros de España y muy pocos autores se dedicaban a la literatura infantil", analizó Jaime Alfonso Sandoval, autor de la novela "República Mutante" y uno de los invitados de la Feria de Montreuil. Pero desde hace diez años, la situación está cambiando y se están creando nuevas editoras mexicanas especializadas en este ámbito.

En México, los organizadores de la Feria francesa descubrieron un sector dinámico, que está ganando autonomía. "Existe una voluntad de las editoras mexicanas de llegar a una producción especificamente mexicana", destaca Vassallo.

Influencia global y estatal

El sostenido crecimiento de la literatura infantil y juvenil es un fenómeno global. Se debe en gran parte al éxito de novelas como la famosa serie Harry Potter, que les demostró a las editoras que podía existir una fuerte demanda en el sector.

"Durante años, México sólo recibía libros de España y muy pocos autores se dedicaban a la literatura infantil"

Jaime Alfonso Sandoval, escritor mexicano

En México, también está vinculado con un programa del Estado. El gobierno compra libros para las escuelas del país, con el fin de sostener la producción editorial y fomentar el hábito de la lectura entre los jóvenes. Gracias a esta política, las editoras venden la mayor parte de su producción a través de las redes escolares.

Tener una producción propia puede ser importante para trasmitirles a los jóvenes mexicanos el hábito de la lectura, según Sandoval. "En mis novelas, hablo de la emigración, del desempleo, de la pobreza, de los mexicanos que salen a buscar trabajo y educación", comentó el escritor. Según él, estos temas nacionales pueden incitar a los jóvenes a leer. "Así los niños se ven reflejados en los libros", opinó.

A pesar de los esfuerzos de producción, el acceso a los libros sigue siendo difícil en el país. México tiene uno de los índices de lectura más bajos a nivel mundial, según varias encuestas publicadas por instituciones como la OCDE o la UNESCO.

Este dato no parece desalentar a Sandoval. Al contrario, el autor lo ve como un desafío, "un compromiso social y personal, para formar nuevas generaciones de lectores y elevar el nivel educativo en México".

Magali Lagrange

París

 

Viernes, 9 de diciembre de 2011

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