La manzana es un fruto universal por sus simbolismos. Los hebreos y egipcios desconocían su existencia y sin embargo forma parte del mito de la creación: esta jugosa fruta se transformó en símbolo del pecado carnal así como de la maldad en sí misma. Algunos párrocos solían decir: "maum e malo" (todo lo malo proviene de la manzana), pero en algunos países nórdicos los árboles de navidad son adornados con manzanas como símbolo de fortuna.
Según la mitología griega, durante una boda a la cual no fue invitada la diosa de la discordia, lanzó una manzana. En la cáscara de ésta se leía "Para la más bella". Fue entonces cuando la diosa del matrimonio (Hera), la diosa de la sabiduría (Atenea) y la diosa del amor (Afrodita) comenzaron a pelear.
Decidieron que el hombre más guapo de la tierra, el príncipe troyano Paris, decidiera quién merecía ser la dueña de tal fruto. Éste le entregó la manzana a la seductora Afrodita y esto provocó la caída de Troya.
Para los poetas las manzanas significan el sexo femenino, por ser comparadas constantemente con los pechos de una mujer.
Lanzar una manzana a alguien es también significado de una invitación amorosa, gracias a la leyenda de Freyr que le declaró a Gerda, la hija de un gigante, su amor enviándole manzanas de oro.
También se dice que cuando una mujer se embaraza debe comer manzanas para que el niño nazca fuerte.
Por último, hay que recordar que fue una manzana la que permitió que Newton formulara su teoría gravitacional.
Por esto y por muchas cosas más la manzana es protagonista de la historia… pecado, maldad, fortuna, discordia, mujeres, romance, sabiduría y fortaleza.
Por las manzanas, por la sidra ¡salud!
Zavel Castro
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