Arqueólogos mexicanos descubrieron más de 30 entierros
humanos de unos 1.450 años de antigüedad en la periferia de las
majestuosas pirámides de Teotihuacán (centro de México), informó el
miércoles en un comunicado el Instituto Nacional de Antropología e
Historia (INAH).
En la periferia de la zona arqueológica, ubicada a unos 40 km de la capital mexicana, se descubrieron restos humanos de niños, mujeres y hombres y cientos de objetos usados como parte de las ofrendas.
El descubrimiento se dio a 2 km de la Ciudadela del sitio prehispánico, durante los trabajos de exploración de cinco estructuras de las que se tenía conocimiento desde 1973, indicó el INAH.
A partir de las excavaciones "se determinó que las cinco estructuras fueron de uso doméstico, y que una de ellas, denominada Edificio 8 fungió como área residencial de la clase media", detalló el INAH, citando al arqueólogo Gonzalo Morales, responsable de los trabajos en el sitio.
De la treintena de entierros hallados -cuyas ofrendas en conjunto suman más de 33.000 objetos y fragmentos de cerámica- destaca el del Edificio 8, dijo el INAH.
En los restos de esa estructura se descubrieron 15 con restos óseos de mujeres, niños y recién nacidos que aún están siendo analizados, así como objetos de tipo ceremonial, entre ellos un vaso esgrafiado y lustroso del Golfo de México que datan de entre los años 225 y 550 de nuestra era.
Allí "se hallaron los vestigios de cinco cuartos, tres patios, un pórtico, dos sistemas de canales y un muro perimetral, así como restos de pintura roja en pisos estucados, además de espejos de agua (pequeños patios hundidos que se llenaban de agua) y sistemas de drenaje", prosiguió.
"Uno de los entierros era múltiple; estaba integrado por restos óseos de una mujer de entre 25 y 30 años, y cuatro niños de 4 a 10 años, cuyas osamentas presentan deformación craneal; en los tres depósitos funerarios restantes se descubrieron los restos de dos mujeres que al fallecer tenían entre 30 y 35 años, y una osamenta incompleta de un neonato, quizá de un año", dijo el INAH.
De Teotihuacán, un centro religioso que abarca un área de 25 km cuadrados y que fue abandonado en algún momento del siglo VII debido a problemas económicos, sociales y políticos, sólo se ha explorado alrededor de 5% pese a que las excavaciones de la antigua ciudad tienen más de un siglo.
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En la periferia de la zona arqueológica, ubicada a unos 40 km de la capital mexicana, se descubrieron restos humanos de niños, mujeres y hombres y cientos de objetos usados como parte de las ofrendas.
El descubrimiento se dio a 2 km de la Ciudadela del sitio prehispánico, durante los trabajos de exploración de cinco estructuras de las que se tenía conocimiento desde 1973, indicó el INAH.
A partir de las excavaciones "se determinó que las cinco estructuras fueron de uso doméstico, y que una de ellas, denominada Edificio 8 fungió como área residencial de la clase media", detalló el INAH, citando al arqueólogo Gonzalo Morales, responsable de los trabajos en el sitio.
De la treintena de entierros hallados -cuyas ofrendas en conjunto suman más de 33.000 objetos y fragmentos de cerámica- destaca el del Edificio 8, dijo el INAH.
En los restos de esa estructura se descubrieron 15 con restos óseos de mujeres, niños y recién nacidos que aún están siendo analizados, así como objetos de tipo ceremonial, entre ellos un vaso esgrafiado y lustroso del Golfo de México que datan de entre los años 225 y 550 de nuestra era.
Allí "se hallaron los vestigios de cinco cuartos, tres patios, un pórtico, dos sistemas de canales y un muro perimetral, así como restos de pintura roja en pisos estucados, además de espejos de agua (pequeños patios hundidos que se llenaban de agua) y sistemas de drenaje", prosiguió.
"Uno de los entierros era múltiple; estaba integrado por restos óseos de una mujer de entre 25 y 30 años, y cuatro niños de 4 a 10 años, cuyas osamentas presentan deformación craneal; en los tres depósitos funerarios restantes se descubrieron los restos de dos mujeres que al fallecer tenían entre 30 y 35 años, y una osamenta incompleta de un neonato, quizá de un año", dijo el INAH.
De Teotihuacán, un centro religioso que abarca un área de 25 km cuadrados y que fue abandonado en algún momento del siglo VII debido a problemas económicos, sociales y políticos, sólo se ha explorado alrededor de 5% pese a que las excavaciones de la antigua ciudad tienen más de un siglo.
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