Da Conaculta 160 mdp a películas por dedazo

Entregó el dinero sin concurso a cuatro proyectos; directores y realizadores acusan tráfico de influencias y exigen explicar por qué se actuó así en periodo electoral; señalan a Consuelo Sáizar Entre las cintas apoyadas, dos abordan hechos que marcaron a antiguos regímenes priistas

El Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta) financió con alrededor de 160 millones de pesos y sin concurso de por medio, cuatro películas con temática política en este año electoral, en una decisión unilateral cuestionada por cineastas, que exigen investigar si detrás de ésta hay corrupción, tráfico de influencias o favoritismo. Entre los proyectos financiados se encuentra Colosio, el asesinato, del cineasta Carlos Bolado, quien en su historia revive teorías distintas a la de que el homicida del candidato priista en 1994 fue sólo Mario Aburto. Su filme será estrenado a principios de junio, es decir, un mes antes de las elecciones. Los proyectos que recibieron montos de entre 40 y 60 millones de pesos, de manera directa y por una vía diferente a la que marca la normatividad, fueron Morelos, Colosio, 5 de Mayo y Ciudadano Buelna, de acuerdo con información de Víctor Ugalde, director de la Sociedad Mexicana de Realizadores de Obras Audiovisuales. La dependencia que encabeza Consuelo Sáizar ignoró al Instituto Mexicano de Cinematografía (Imcine), encargado de entregar financiamiento a través de Fidecine, Foprocine y Eficine, previo concurso, y asignó discrecionalmente el dinero a través de lo que en su momento se llegó a denominar Conaculta Cine, aunque después de la presión de los cineastas, se aclaró que se trataba de los Estudios Churubusco, encabezados por Manuel Graneros. Lo que aún no se transparenta es la procedencia de los recursos: “Preguntamos de dónde venía el dinero y se nos dijo que era a través de una ventana de la Secretaría de Hacienda, en una primera respuesta, y en una segunda respuesta que procedía de una ventana de la Secretaría de Economía, lo cual resultó falso ya que en efecto Economía está apoyando al cine pero sólo en el tema de animación no en largometrajes de este tipo”, reveló Ugalde. Inconforme también con la forma en que se procedió en este caso, Carlos Carrera, presidente de la Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas publicó en enero una carta de inconformidad en la que, entre otras cosas, se muestra alarmado con el monto asignado a sólo cuatro proyectos —entre 160 y 240 millones de pesos, según estimaciones—, cuando el presupuesto de Foprocine “ha sido de máximo 100 millones y para todas las demás películas”. EL CASO COLOSIO. En entrevista con La Razón, Víctor Ugalde mostró suspicacia con el hecho de que después de varios años en los que los proyectos relacionados con el caso Colosio fueran rechazados por las instancias que financian los proyectos, ahora sí se haya entregado dinero de manera directa a una cinta con esta temática. “En la política no hay casualidades, por eso no es casual que surja una película como Colosio, con un corte eminentemente enmarcado en la guerra PAN-PRI y que surja en medio de un proceso electoral. Yo recuerdo por ejemplo un guión de Roberto Rochín, que se presentó a concurso y no se quiso aprobar, y recuerdo otros tres o cuatro sobre el mismo tema que no pasaron”. Este proyecto se estrenará en junio, informó Claudia del Castilllo, publirrelacionista de la película, que relata la historia de un militar que realiza una investigación paralela a la oficial sobre el asesinato del candidato presidencial en el contexto de un México convulso, en donde predomina un “sistema de impunidad”. “Solemos tener como sociedad una memoria corta. A veces es necesario reeducarnos para no olvidar”, declaró Bolado en una entrevista con la revista Proceso sobre este tema. LA TRAMA CRISTERA. Otra película que se desarrolla en circunstancias políticas que atañen a los regímenes priistas es la de Los últimos cristeros, quienes aparecen como perseguidos del régimen de Lázaro Cárdenas, quien cambió de nombre el Partido Nacional Revolucionario por el de Partido de la Revolución Mexicana y que después se convertiría en el PRI. En este caso, el financiamiento de la película sí se dio a través de Imcine y fue de un millón 946 mil 43 pesos. En medios de comunicación, analistas han sugerido que los guiones de este tipo de cintas fueron revisados en Los Pinos.

LA RAZÓN Por: Nancy Escobar